Tratamiento

La infección en la madre embarazada se puede tratar con espiramicina.

La infección fetal (diagnosticada durante el embarazo) se puede tratar con pirimetamina y sulfadiazina.

El tratamiento de los niños con toxoplasmosis congénita incluye clásicamente pirimetamina, sulfadiazina y leucovorina durante un año. En algunas ocasiones, a los bebes también se les suministran esteroides si su visión está amenazada o si el nivel de proteínas en el líquido cefalorraquídeo es alto.

Posibles complicaciones


*Hidrocefalia
*Ceguera o incapacidad visual severa
*Retardo mental severo u otros problemas neurológicos

Prevención

A las futuras madres o madres gestantes se les puede hacer un examen para determinar si corren el riesgo de sufrir toxoplasmosis.

Las mujeres embarazadas que tienen gatos como mascotas pueden estar en mayor riesgo de contraer toxoplasmosis. Deben evitar el contacto con cualquier material que pueda estar infectado con heces de gatos o que pudieran estar contaminados por insectos expuestos a las heces de gatos (cucarachas, moscas, etc.).

La carne debe estar bien cocida y se deben lavar las manos después de manipular carne cruda.