PORCENTAJES DE CONTAGIO TRIMESTRAL

En el primer trimestre el porcentaje es del 14%, del 29% para el segundo y el 59% para el tercero. La contaminación fetal pasa del 1% en el primer trimestre al 90% si ocurre durante el tercer trimestre. La septicemia fetal se produce con difusión del parásito a los diversos tejidos principalmente retina, cerebro, tejido muscular, corazón, hígado, bazo, pulmón, etc.

Con la aparición de anticuerpos se origina las formas quisticas, las cuales pueden invadir e infectar otros órganos.

La probabilidad de una primoinfección durante el embarazo es de 0,5-1%, con independencia del área geográfica. La probabilidad global de transmisión maternofetal es del 50%, aunque parece ser considerablemente inferior durante el primer trimestre y superior durante el último, y puede reducirse al 5% o menos si la infección de la madre se detecta y se administra el tratamiento adecuado. La incidencia global de infección por toxoplasma es de 1-3 por cada 1.000 nacidos vivos.

Si se contagia la enfermedad al principio del embarazo, es menos probable que el parásito atraviese la placenta y llegue al feto, pero si lo hace los efectos son más serios (teniendo en cuenta que las primeras semanas se consideran las principales etapas del desarrollo intrauterino). Si la mujer embarazada contrae la infección más tarde (es más posible que esto ocurra) las consecuencias en el feto son menos severas.

Por lo general, el 40% de los bebés de madres afectadas son portadores de la enfermedad. De estos, es factible que 10% tenga una afección seria.